Las claves del fracaso de Di Matteo


Anoche, por patriotismo y por comodidad, decidí ver el Valencia-Bayern. Como bien sabéis, era en abierto por TVE 1 y eso me hizo decantarme por él, aunque no por ello le quité ojo al Juve-Chelsea, plato fuerte de la jornada. Ganaron los italianos y ganaron bien, con un pobre Chelsea enfrente que nada tiene que ver a lo que nos tiene acostumbrados en la Premier, una competición donde allí sí que les vale aquello del "patadón y a correr".

A decir verdad, era solo cuestión de tiempo que este equipo se estrellara. Y que conste que tenía este post escrito antes del cese de Di Matteo como entrenador. Ya en Munich se vieron las carencias claras y de no ser por un colosal Drogba estaríamos hablando de que la última Champions la ganó el Bayern.

De inicio, le faltan los mimbres básicos: la construcción en medio. El mayor error de Di Matteo bajo mi punto de vista fue cargarse a Oriol Romeu cuando más a gusto se estaba encontrando con Villas-Boas y era un fijo para el portugués, por delante de Lampard. El canterano culé estaba progresando a unos pasos tan agigantados que incluso se hablaba ya del interés del Barça en recuperárle. Ahí queda eso.

Fue llegar Di Matteo y el equipo tuvo un bajón, aunque coincidiendo con la peor racha de Mata, todo sea dicho. Y es que el ex-valencianista no terminaba de adaptarse al nuevo esquema propuesto. Pasaron de un 4-3-3 a un 4-2-3-1, donde Mata alternaba banda izquierda con mediapunta. Tácticamente, visto así era lógico el bajón que dio el futbolista.

Si a ello le unimos que, como dije antes, el equipo carece de constructores es más fácil de entender este fracaso en Champions. De nada sirve tener a Hazard si no le llegan balones. Más aún, cuando Di Matteo se empeñó en ponerle de falso 9 y dejando a Torres en el banquillo, favoreciendo aún más a que la defensa de tres de la Juve se comiera al Chelsea, como el propio Conte dijo en rueda de prensa posterior.

El Chelsea necesita alguien que suba la pelota y si realmente lo de Fellaini está en negociaciones, Abramovich dará con la tecla. Eso si Di Matteo no tiene pensado cargarse antes a Obi-Mikel, que sería mi elección y respetaría a Ramires, puro pulmón.


La mejor prueba de todo esto que digo fue el gol de Vidal, mediocentro llegador y como he dicho en cantidad de ocasiones para mi el mejor del mundo en ese aspecto: crea, ayuda abajo, destruye y para ponerle la guinda al pastel ve puerta con asiduidad. Justo el tipo de jugador que necesita el Chelsea: una nueva versión de Lampard.

De hecho, Di Matteo se dio cuenta demasiado tarde de la necesidad del regreso de Romeu, poniéndole de inicio contra el WBA, en la última derrota sufrida en Premier League por 2-1 donde, dicho sea, se volvió a cargar tácticamente a Mata y ya venía probando a Hazard como falso 9 por detrás de Torres.


Resumiendo: el equipo fracasó, la pizarra viene siendo un desastre y llega a la última jornada de Champions con el panorama de que tanto a la Juve como al Shakhtar les vale el empate para pasar ambos y dejarles fuera. Ahi queda eso.

No hay comentarios

Con la tecnología de Blogger.